- El 8 de junio se celebra en Estocolmo uno de los enlaces más esperados de este año.
- La Familia Real española no acudirá a la boda al no tratarse de una princesa heredera.
Quedan pocos días para una de las bodas del año: la de Magdalena de Suecia y Chris O’Neill. El enlace se llevará a cabo el 8 de junio en Estocolmo y poco a poco conocemos nuevos detalles del que será el día más importante para los novios.
Según las últimas informaciones, Magdalena vestirá un traje diseñado por el italiano Valentino, apostando por la moda internacional para su vestido de novia. No seguirá de este modo la estela de su hermana, la heredera al trono sueco, Victoria de Suecia, que prefirió al diseñador de su país Pär Engsheden. Eso sí, para las fiestas previas a la ceremonia, Magdalena tiene previsto usar varios modelos de este modisto sueco.
En primavera, la princesa viajó a Milán y París junto a sus dos amigas íntimas, Louise Gottlieb y Emma Pernald, para elegir y participar activamente en la elaboración de su traje nupcial. Vestirá varios diseños durante el día de la boda y la noche previa, momento en el que se celebrará una gran cena de gala con más de 300 invitados llegados de todas las partes de Europa.
También hemos podido saber ahora que tras la boda, Magdalena no cambiará su apellido por el de su ya marido y seguirá llamándose Magdalena Teresa Amelia Josefina. Esto no es algo habitual, ya que, por ejemplo, sus tías, también princesas, sí que adoptaron el apellido de sus respectivos maridos al casarse.
Por su parte, Chris O’Neill no adquirirá título nobiliario alguno y seguirá siendo ciudadano de Estados Unidos, según la prensa sueca. «El Sr. Christopher O’Neill ha solicitado respetuosamente seguir siendo un ciudadano privado y no recibir un estatus real», recoge un comunicado publicado en la página web que han creado con motivo de la boda. Chris no llevará el título de Su Alteza Real el Príncipe de Suecia, ni el de Duque de Gestricia y Hälsingland.
La Casa del Rey ha confirmado que no enviará representación por parte de España a este enlace, ya que no es una boda de alto rango, porque la princesa no es la heredera de la corona sueca. Por su parte, la corte británica ha anunciado que serán los condes de Wessex los que acudirán como representates de la reina Isabel II.